miércoles, 17 de septiembre de 2008

El tren de las 3:10 / Bale vs Crowe


Vaya, vaya. Va a resultar que mi padre tenía razón cuando me repetía que nunca alcanzaré una verdadera cultura cinematográfica si no saboreo el aroma del western clásico, el género que él tanto ama y nunca se cansa de redescubrir. En mi caso, todo eran prejuicios e ideas falsamente concebidas: me echaba para atrás el amarillo árido de las llanuras norteamericanas, la masculinidad arrogante que desprendían los protagonistas de la aventura, las eternas batallitas entre indios y vaqueros. Me gustó (aunque no deslumbró) la consideradísima "Centauros del desierto" del excelente John Ford y me resultó hermosa la muy tardía "Bailando con lobos" de Kevin Costner (la favorita de mi padre, por su insólito romanticismo "mestizo"). Sin embargo, se trata de un género que nunca me ha llamado especialmente, no me provoca un verdadero interés.
Pero, ya saben, las cosas cambian, y esta nueva (aunque haya llegado a España con un año de retraso) "El tren de las 3:10" quizá me obligue a replantearme las cosas. Remake de un aclamado "western de cámara" de los años 50, 3: 10 to Yuma (el tíulo original) supone, no sólo una nueva sorpresa en la irregular filmografía de James Mangold (tras la notable "En la cuerda floja"), sino la demostración de que el cine del oeste, tras el indispensable lavado de cara, tiene perfecta cabida en el panorama actual.

Russel Crowe (en el papel de un forajido rabiosamente inteligente y perversamente provocador) y Christian Bale (como padre de familia cojo, honesto, vencido por las dificultades económicas, que se ve obligado a conducir al primero hasta el tren que lo llevará a la cárcel) protagonizan un duelo interpretativo intenso e inolvidable que toca lúcidamente temas como la moral, la familia, el heroísmo o la supervivencia. Acción, melodrama e intimismo (incluso algún apache) se funden así bajo la forma de hondos diálogos, trepidantes persecuciones y emotivas ecsenas que si bien no mantienen el mismo nivel (es dfícil en 2 horas) sí por lo menos el brío, interés y profundidad de la propuesta.

Ojalá todo el cine actual fuera como esta recomendable cinta que espero no pase desaparecida. ¿Quién decía que el western había muerto?



Valoración: ++++